El Cuadro de Mando Integral
El Cuadro de mando Integral (CMI) o Balanced Scorecard, es un método para medir las actividades de una compañía en términos de su visión y estrategia. Proporciona a los administradores una mirada que abarca las prestaciones del negocio.
El Cuadro de Mando es una herramienta de management que muestra continuamente cuando una compañía y sus empleados alcanzan los resultados perseguidos por la estrategia. También es una herramienta que ayuda a la compañía a expresar los objetivos e iniciativas necesarias para cumplir con la estrategia.
El CMI sugiere que veamos a la organización desde cuatro perspectivas, cada una de las cuales debe responder a una pregunta determinada:
- Del cliente (Customer) - ¿Cómo nos ven los clientes?
- Interna del Negocio (Internal Business) - ¿En que debemos sobresalir?
- Innovación y Aprendizaje (Innovation and Learning) - ¿Podemos continuar mejorando y creando valor?
- Financiera (Financial) - ¿Cómo nos vemos a los ojos de los accionistas?
El CMI es por lo tanto un sistema de gestión estratégica de la empresa que consiste en:
- Formular una estrategia consistente y transparente.
- Comunicar la estrategia a través de la organización.
- Coordinar los objetivos de las diversas unidades organizativas.
- Conectar los objetivos con la planificación financiera y presupuestaria.
- Identificar y coordinar las iniciativas estratégicas.
- Medir de un modo sistemático la realización, proponiendo acciones correctivas oportunas.
El sistema de medición de una organización afecta al comportamiento de la gente, tanto del interior como del exterior de la organización. Mucha gente piensa que los indicadores son una herramienta para controlar el comportamiento y para evaluar la actuación pasada. Pero el CMI debe ser utilizado como un sistema de comunicación, de información y de formación, y no como un sistema de control.
Las mediciones son importantes:
“Si no puedes medirlo, no puedes gestionarlo”
Cómo dijo Peter Drucker:
“Todo lo que se puede medir, se puede mejorar“
y de aquí extraemos dos conclusiones:
- No medir aquello que no se tenga intención de mejorar.
- No intentar mejorar algo sin haber identificado el indicador de medida.
Y creo que este el principal error que se comete cuando se diseña e implanta un CMI, en muchas organizaciones, que diseñan o eligen una serie de indicadores para cada una de las 4 áreas y se quedan únicamente en eso, en indicadores. Pero sin tener ninguna relación entre ellos y sin servir al propósito de comunicación, información y formación.
Para más información, recomiendo leer Balanced Scorecard de Robert S. Kaplan y David P. Norton